Se activa de nuevo el noviembre de principios. Y este es para siempre. O para nunca. Porque tiene un poco de ambos y los dos en el mismo sentido. Los años de pensamientos se materializan en un trozo de vida. Las decisiones acertadas que siempre supimos que serían las correctas. Eran nuestras. Hoy forma parte de mí. De este año 2016. De este noviembre. De esta vida y de esta etapa. Un instante en el tiempo grabado a fuego. Con él, miles de recuerdos y la certeza de estar donde tiene que estar. Ahora más que nunca. La piel lo sabe. Yo lo sé. El tiempo también.
Besitos
B