Como siempre, estos días en los que la semana de la moda de París ya ha dado comienzo, y a continuación lo harán todas las demás, los contenidos son muchos. Pero mejor, así iré dejando las propuestas que más me gusten por aquí.
Aunque hay algunas entradas pendientes el desfile de Elie Saab ocupa un lugar primordial en este blog desde que lo descubrí, así que voy a adelantar el mostrar sus propuestas para que además no se quede muy desfasado. Entended que tanta información en tan poco tiempo es difícil de condensar y además así hay, como os digo, contenidos para más tiempo. Lo cual es mejor, ¿no?
Podría dedicar una entrada a cada uno de los diseños. Como casi siempre. Pero empezaré por aquí.
La colección de Alta Costura 2017 está protagonizada por el color champagne. Las transparencias siguen muy presentes, convirtiendo elegantes vestidos en atrevidos, dejando entrever bodys como cuerpo del vestido que después queda cubierto por tules o tejidos brillantes. En cuanto a los escotes los hay de todo tipo, a cual más femenino: manga larga, corta o sin ellas, escote barco en vestidos de telas satinadas,cuellos halter en diferentes tipos de anchos, escotes corazón con adornos, incluso el cuello alto o con lazada tiene cabida.
Las tonalidades son claras en torno al champagne y el blanco, que brilla además con bordados joya, la parte que más caracteriza al diseñador libanés que colección tras colección cubre sus creacciones con detalles de este estilo. Los cinturones también son otra de las señas que más repite, esta vez más anchos de lo normal y con grandes agujeros. Continuando con los colores el azul bebé se cuela en este desfile, en el que también hay algún diseño en azul océano. En resumen, estos son los dos tonos que han acaparado todo el desfile: el champagne y el azul.
Los zapatos varían desde sandalias con plataformas, hasta sandalias planas o salones de punta redonda atados al tobillo.
Las siluetas, femeninas en su totalidad, llevan cortes a la cintura, y se combinan vestidos de corte princesa con otros algo más ajustados que juegan con aberturas en la falda. Pero no solo de vestidos va la cosa, sino que se vuelven a incluir pantalones y la combinación de ambos, monos con capa a partir de la cintura.
Y para terminar, -por el momento, porque como os digo podría estar más tiempo hablando de cada detalle de este desfile, y no descarto que lo haga en algún momento-, no quería dejar de mencionar el look de belleza elegido para las modelos. El toque vintage es evidente con melenas lisas peinadas con raya al medio. Se ve también en gafas de sol redondas y pendientes joya que cuelgan y que lucen más al retiras las melenas de la cara con pañuelos en el pelo modo de diademas. En ocasiones, las diademas se tornan más sofisticadas plagadas de pequeñas joyitas.
Para terminar el pase, la tradicional novia de estos desfiles que de tradicional tiene más bien poco: de corte princesa pero plagado de transparencias, con bordados estratégicos y estampados de hojas, respetando el color champagne. El cuerpo es de manga francesa con escote corazón, cinturón y velo que cubre la cabeza pero no la cara.
Una vez más, Elie Saab ha vuelto a diseñar el vestuario de un cuento de hadas. Quizás he seleccionado demasiadas fotos pero quería que se viera bien lo que os intentaba contar. Si queréis ver el desfile completo, podéis encontrarlo en cualquier web de moda. ELLE
Besitos
B