Gris y rosa, rayas y cuadros, gasas y terciopelo, son algunos de los aspectos que más se repiten a lo largo de este desfile. Una colección de lo más elaborada, que contiene faldas y vestidos en su mayoría y algún que otro pantalón clásico con pinzas en negro o cuadros negros y blanco.
Las capas son protagonistas de algunos de los looks aunque en ocasiones es una impresión debido a la mezcla de estampados y tejidos de los que se componen algunos vestidos o chaquetas, que parecen divididos en partes. Sin duda, una colección llamativa, que mantiene el toque clásico en los colores, haciendo uso del binomio blanco y negro o los tonos neutros como los tierra, pero que sabe hacer resaltar sus prendas gracias a los tejidos como el terciopelo, muy presente, o los bordados en plata y oro que destacan en looks que terminan pareciendo de una época victoriana pero con un punto moderno, gracias a los largos de los vestidos más cortos, por ejemplo. Un detalle que me gusta es el de los calcetines de rejilla que se dejan ver por encima de botines o zapatos, aunque también aparecen otro tipo de calcetines con sandalias de plataforma, o salones semidescalzos al tobillo. Me parece un broche final ideal a estilismos de lo más elaborados.
Besitos
B