Un desfile bajo la nieve parecía el el Moncler Gamme Rogue ya que el blanco ha sido el absoluto protagonista. Los abrigos que en ocasiones cubrían por completo los estilismos que había debajo son los reyes de esta colección, con pelo, broches o aplicaciones florales. Las minifaldas con vuelo o los shorts han sido las opciones que se han presentado para la parte de abajo, dejando ver medias bancas y zuecos con suela de madera. El negro también se ha codeado con el blanco, además de tonos más suaves como el azul, o el dorado o el rojo que lejos de llevarse todo el protagonismo se limita a aportar un pequeño toque de color. Los recogido pulidos a base de trenzas y las cejas plateadas ponen el remate de belleza a este etéreo desfile.
Besitos
B
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